Sunday, April 3, 2011

Claro, breve, conciso… y sin faltas

Excelente artículo de Inma Ferragud en su blog


Claro, breve, conciso… y sin faltas

Cada plataforma comunicativa pide un lenguaje diferente, igual que tiene un contenido y un receptor distintos. Nadie puede pretender escribir de igual modo en prensa, radio o televisión y, ahora, mucho menos en Internet, donde elmicroblogging obliga a la emisión de mensajes de 140 caracteres. Vamos, titulares puros y duros.

Este reducido espacio facilita la inmediatez y agiliza la comunicación, al tiempo que permite actualizar de forma muy rápida la información y crear una interacción natural con otros usuarios. Es la perfección de los medios. Fusiona el titular breve de un periódico, con la espontaneidad de la radio y la exposición en vivo de la televisión.

Es el ‘aquí y ahora’ que todo comunicador ha deseado tener a su alcance, el reporterismo de calle llevado a la red. Por no hablar de su uso como herramienta para contenido publicitario y de márketing: la cuadratura del círculo entre eslogan, relaciones públicas e institucionales, y comunicación corporativa.

Pero, ¿qué tiene que ver todo esto con escribir mal? Llámadme purista; sinceramente, no lo entiendo. Debe ser deformación profesional, pero a mí las faltas de ortografía me dañan la vista y, mucho más, cuando proceden de profesionales que se dedican a la comunicación, ya sean periodistas, community managers, publicistas o marketianos.

En serio. Una cosa es recortar caracteres de una palabra basándose en contracciones, iniciales o acrónimos, y otra muy distinta pasar de la “H”, no acentuar (sí, las mayúsculas también se acentúan… no es una opción), confundir entre “haber” y “a ver” (o peor, escribir “aver) y así cientos de patadas al diccionario. Chirrían.

La excusa del medio on line, de la velocidad de este tipo de comunicación o del posicionamiento SEO no convence, al menos no a mí. Ni siquiera en el tema de los acentos. Los comunicadores on line también debemos ser responsables no solo de lo que escribimos, sino de cómo lo hacemos. ¿De qué sirve dominar mil y una herramientas de medición, análisis, SMO… si no se respetan las reglas ortográficas? ¿Porque la plataforma sea Internet ya no consiste en comunicar? Ahora que todo es ordenador, ¿habrá que volver a los Cuadernos Rubio? ;)

No me imagino un titular de periódico (que realmente contiene menos caracteres) con palabras acortadas, sin acentos o lleno de faltas de ortografía, con el fin de que el texto encaje en el hueco habilitado para resumir la noticia.

Vale, el espacio es limitado. Pues aprovechémoslo, usemos la imaginación, distingámonos. Y ante la duda, consultemos, por ejemplo, la RAE y su Diccionario Panhispánico de Dudas o la Fundeu y su Manual de Estilo para nuevos medios.

Vuelve la máxima de “Claro, breve y conciso” de la comunicación de siempre, un verdadero lujo para los creadores de contenido.

http://inmaferragud.com/2011/03/28/clarobreve/